El beneficio, pactado bajo la Ley de Servicios Básicos, terminaba originalmente el próximo 31 de diciembre de 2021, pero las empresas le darán continuidad hasta el próximo 31 de enero de 2022.
Esta decisión “beneficiará a gran parte de los más de 760 mil clientes que a la fecha mantienen deudas vencidas en sus cuentas de electricidad, a quienes se invita a realizar un convenio sin pie y sin intereses accediendo a los canales de atención de cada empresa”, señalaron desde las compañías.
Además, especificaron que el objetivo de la Ley N° 21.249 “no debe ser favorecer a clientes de altos consumos, es decir, por encima de 2 o 3 veces el consumo promedio mensual de 250 kWh, y que se encuentren en condiciones de pagar sus obligaciones”.
Por último, el gremio afirmó que “confía que en la discusión en curso entre los poderes Ejecutivo y Legislativo, el Estado de Chile establezca a la brevedad una salida viable al problema de morosidad de servicios básicos, permitiendo -por una parte- dar un alivio a las familias más vulnerables, y por otra, respetar los derechos constitucionales de todos los actores involucrados”.